Diálogo Abierto en Salud Mental: Una Experiencia Transformadora en el CSMA2 de Badalona
En los últimos años, el modelo finlandés de Diálogo Abierto ha ido ganando reconocimiento internacional por su enfoque profundamente humano, comunitario y respetuoso con las personas que atraviesan crisis de salud mental. En el Centre de Salut Mental d’Adults 2 (CSMA2) de Badalona, este enfoque se puso en práctica en noviembre de 2016, iniciando una experiencia que, aunque modesta en números, ha sido profundamente transformadora tanto para las personas atendidas como para los profesionales implicados.
¿Qué es el Diálogo Abierto?
Desarrollado en Finlandia en los años 80, el Diálogo Abierto propone una forma radicalmente diferente de acompañar las crisis psíquicas. En lugar de centrarse en diagnósticos o decisiones unilaterales, invita a reuniones de tratamiento donde participan la persona afectada, su familia, su red social y un equipo multidisciplinar. Estas reuniones se basan en siete principios esenciales: ayuda inmediata, inclusión de la red, flexibilidad, responsabilidad compartida, continuidad, tolerancia a la incertidumbre y dialogismo.
La clave está en generar un espacio seguro y horizontal donde todas las voces son escuchadas, sin interpretaciones ni juicios, permitiendo así que emerjan nuevos significados y narrativas en torno al sufrimiento.
La experiencia en Badalona
El primer caso atendido en el CSMA2 con este enfoque se dio apenas una semana después de una formación con Jaakko Seikkula, uno de los fundadores del modelo. Se trató de una joven que acababa de recibir el alta hospitalaria tras una crisis psicótica. La reunión inicial con su familia y el equipo fue sorprendentemente natural y fluida. A partir de ahí, se sucedieron encuentros semanales, quincenales y luego mensuales durante dos años, con una evolución muy positiva: la paciente retomó estudios universitarios, consiguió empleo y dejó la medicación progresivamente.
Desde 2016 hasta 2019, se pusieron en marcha 14 procesos terapéuticos bajo esta metodología. Nueve de ellos, con más de seis meses de duración, permitieron observar cambios significativos:
*Mejoría clínica y funcional en la mayoría de los casos.
*Reducción o retirada de la medicación en cinco de los nueve casos.
*Inserción laboral en seis personas.
*Iniciativa de estudios superiores en dos casos.
*Disminución de ingresos hospitalarios en los casos más graves.
Todo ello con una participación activa de equipos multidisciplinares y una aproximación flexible y adaptada a cada situación.
Más allá de los resultados
Más allá de los datos, lo que resalta esta experiencia es su profunda dimensión humana y transformadora. Practicar Diálogo Abierto implica sostener emociones intensas, escuchar con presencia, tolerar la incertidumbre y compartir la responsabilidad del proceso terapéutico. Para los profesionales, también ha supuesto una transformación interna: una manera diferente de relacionarse, más humana, más igualitaria, más cercana.
En palabras del equipo: “El DA nos invita a una democratización de la atención. No solo cambiamos la forma de tratar, sino también la forma de estar con el otro. Nos transformamos con cada encuentro.”
Retos y futuro
A pesar de las limitaciones del contexto local —escasez de recursos, fragmentación de servicios, dificultades organizativas— el DA ha demostrado ser un modelo viable, valiente y esperanzador. Su desarrollo plantea un cambio de paradigma: de un modelo biomédico centrado en el síntoma, a un enfoque relacional, comunitario y dialógico, alineado con los Derechos Humanos y la dignidad de las personas.
Actualmente, el CSMA2 forma parte de la Open Dialogue Learning Community internacional, y se proyecta como un referente dentro del ámbito hispanohablante.
Uma Zuasti.